HERMANDAD NTRA. SRA.VIRGEN DEL CARMEN, COLONIA SANTA INES

HERMANDAD NTRA. SRA.VIRGEN DEL CARMEN, COLONIA SANTA INES

Historia

REDACCION:
JUAN ANTONIO VAZQUEZ
FCO DE PAULA LOZANO
DISEÑO:
FCO DE PAULA LOZANO
FOTOGRAFIA:
FCO LOZANO
FEBRERO 2016

La historia de la Virgen del Carmen y la iglesia de la Colonia Santa Inés van de la mano. Las primeras misas se oficiaban en la capilla que tenía la familia Escobar en su casa, a la que solo Iván unos pocos trabajadores de la fábrica y los Escobar asistían desde una habitación que daba directamente a la capilla.

Todo comienza a principios de los años 40, cuando la Parroquia de La Purísima Concepción es encomendada a los padres Carmelitas descalzos que vuelven a Málaga después de ciento diez años de ausencia, desde el año 1835, en el que el gobierno de Mendizábal expulsó a las Ordenes Religiosas y dictó la célebre ley de desamortización. Esta Parroquia está ubicada en lo que antes se conocía como Haza del Campillo y después viviendas protegidas de Gamarra.

Dada la escasez de sacerdotes que había en esos años encargan a esta pequeña comunidad de Carmelitas la Parroquia del Puerto de la Torre y la capilla de la Colonia de Santa Inés.

El fraile Carmelita asignado al Puerto de la Torre y a la capilla de la Colonia fue el Padre Gerardo, a quien recordamos como hombre de escasa estatura pero de un corazón muy grande, muy emprendedor y comprometido con la barriada, quien, como buen Carmelita, inicia entre los habitantes de la Colonia la devoción a la Virgen del Carmen.

En el año 1950, uno de los actos organizados por el Obispo Angel Herrera Oria, fue la implantación de las Misiones generales, para que la palabra de la Iglesia llegara a todas las calles y rincones de la ciudad para lograr un ambiente de fervor y devoción, que fueron un rotundo éxito.

Al no existir un lugar adecuado de reunión en nuestra barriada, se habilita un nuevo local situado fuera de la fábrica de ladrillos, que por entonces era almacén de mármoles y otros materiales diversos. Además del edificio, D. Modesto se hizo cargo de la manutención de los frailes que comían en casa del encargado de la fábrica Manuel Lozano.

Una vez que se traslada la capilla al nuevo local de calle Manuel Rivanedeira y como labor preparatoria a las misiones antes mencionadas, se acude a los vecinos más pudientes para que colaboren en su equipamiento.

El Padre Gerardo obtiene la donación de las imágenes del Cristo de las Misiones y de la Virgen del Carmen la cual viene junto con otras dos (la de la Purísima y la del Palo) de los talleres de imaginería religiosa de olot (Gerona) que fueron los impulsores de este tipo de fábricas y algunos continúan en nuestros días. Fueron los donantes los propietarios de las fincas El Cónsul, Almellones y Píndola.

En los años 50 las salidas procesionales de la Virgen no fueron continuas, utilizándose como trono unas andas prestadas por la Parroquia de la Purísima y en ocasiones por la del Puerto de la Torre.

La interrupción se produce con el relevo del Padre Gerardo el año 1957 y la llegada del Padre José María Millán.

Aproximadamente en el año 1960, un grupo de mujeres de esta barriada deciden resucitar las salidas procesionales y crean una pequeña Hermandad en la que participan solo mujeres, inicialmente en número de once, en la que admiten a un único hombre, José Torres Machado, nombrado secretario y tesorero.

La procesión se ensalza con la presencia de la banda de música municipal de Málaga, ya que era vecino nuestro el inolvidable maestro Artola, y terminaba siempre con una vista de fuegos artificiales.

Desde los comienzos, las salidas de la Virgen por las calles de la Colonia se asociaron con las fiestas en el barrio, y a partir de los años 1962 y1963, estas fiestas van cobrando importancia, dando lugar a la actual feria de la Colonia de Santa Inés en honor a la Virgen del Carmen.

Para canalizar este sentir nuestro, enseguida nace la junta de festejos que es la madre de la asociación de vecinos y la peña cultural.

Esta primitiva junta de festejos era quien organizaba todos los actos y la que hacía frente a los gastos de procesión, con la colaboración económica de los vecinos, que se solicitaba casa por casa en los días anteriores a los festejos.

Durante estos años, primeros de los 60, es cuando, mediante gestiones de la Hermandad y por el entonces Párroco, José María Millán, se adquiere el primer trono, cuyo coste fue de 100.000 pesetas, y que ha sido conservado hasta nuestros días, restaurado y ampliado en varias ocasiones, la primera de ellas en el año 1984.

El primer capataz de trono al que se encomendó la salida de la Virgen del Carmen en procesión por las terrizas calles de la barriada fue Antonio Alcaide, vecino al que se le suponía mayor capacidad técnica por ser hombre de trono de la Cofradía de la Esperanza de Málaga. Poco después cedió el honor a Francisco Rey, entre nosotros Paco “el sevillano”. Cuando éste comienza a sentir el peso de su enfermedad entrega la responsabilidad a Paco Lozano, allá por 1980, quien en un iniciado relevo se le va pasando a su propio hijo.

Todos los capataces y los hombres de trono, jóvenes de esta barriada, que sucesivamente han ido tomando el relevo a sus mayores, hemos sentido llevando a nuestra Virgen del Carmen por las calles de la Colonia, en los atardeceres del domingo de julio siguiente a su festividad, momentos de emoción y de gloria.

Como dice nuestro fandango:
De gloria,
Ese domingo de julio,
Suenan campanas de gloria,
A hombro de sus Hermanos,
Caminando la Señora,
Por las calles de la Colonia.

En 1967 el Obispado de Málaga crea como Parroquia la Capilla de nuestra barriada, segregándola del Puerto de la Torre.

En el año 1984, con la llegada de D. Francisco Millán como nuevo Párroco, se inicia lo que se pueden llamar tiempos modernos. Se constituye la Hermandad de la Virgen del Carmen como entidad canónica malagueña en 1992, dentro de las Hermandades de Gloria y se elige como primer Hermano Mayor a Andrés Torres, en este tiempo, primeros años de los 90, se crea la ofrenda de flores que realiza la barriada a la Virgen del Carmen y con la que se adorna el trono para la procesión. Desde el inicio realza este acto la academia de baile María Elena Lozano, Hasta constituir un acto devoto de una barriada a su Patrona a través de bailes regionales y flores, que arranca a nuestro vecino poeta Manolo Aguilar aquellos versos.

Flores, flores y más flores,
A los pies de la Virgen,
sus ramos,
Bailando nuestro folklore,
Nuestro corazón te damos.

Esta pequeña Colonia, dentro de su modestia, tiene el orgullo de haber sido la pionera en la ofrenda de flores acompañada de bailes regionales y el haber tenido a la primera mujer como Hermana Mayor de su Hermandad, pues a Andrés Torres le relevó en la responsabilidad la Hermana Mayor María del Mar Vázquez.

En el año 1986 dona el estandarte de la Virgen la señora Pepita Campos, quien consiguió traer al desfile procesional de aquel año la banda de música y una sección del tercio de la legión Alejandro Farnesio.

En el año 1993 la junta de gobierno de la Hermandad encarga una nueva remodelación del trono, proyecto de José Liébana, escultor con taller en nuestra barriada hermana de la Finca de la Palma, la cual recibió la visita de nuestra Virgen del Carmen (año 1996) en una pequeña procesión portada en un pequeño trono prestado por la Cofradía de Zamarrilla, fue unos de los actos de la Misión Popular Nueva Evangelización, organizada por el Obispado.

Con María del Mar Vázquez se financió la restauración de la imagen de la Virgen, ya deteriorada por los años y por estar modelada en escayola policromada, y se finalizó la reforma del trono, según proyecto de Liébana, demorado por causas económicas.

Con el crecimiento de la población en los alrededores de la Colonia, en el año 2002 se traslada la Parroquia de inmueble, una bonita iglesia construida en los terrenos conocidos como las Morillas.

En el año 2002, también se produce el relevo de Hermano Mayor, según los estatutos, cuyo nombramiento recae en Jesús Bravo Florido.

Al año siguiente, en 2003, D. Francisco Millán por su edad y caer enfermo es sustituido por D. Antonio Jesús Coronado. Unos años después en 2010, D. Antonio va a Roma a hacer derecho canónico y lo sustituye D. Felipe Reina que está con nosotros hasta 2015 siendo sustituido por D. Francisco Castro.

También, a finales de 2003 es trasladada en un rosario vespertino la imagen de la Virgen del Carmen de la antigua iglesia a la actual, y se venera en una capilla lateral de la Parroquia junto a la pila Bautismal.

A Jesús Bravo, en 2006, lo sustituye en el cargo de Hermano Mayor Francisco Lozano.

Tampoco se nos puede olvidar la labor fundamental de las personas que se ocuparon del mantenimiento y cuidado de lo necesario para el culto, que recayó, en tiempos históricos de la Hermandad, sobre Manuel Lozano, cuya labor continuó Carmen Vera y en nuestros días Ana Florido.

En colaboración con la junta del distrito, en 2012, se empieza a hacer unos cuadros con la imagen de la Virgen, para el cartel tanto de la Hermandad como de la feria.

La llamada de la Virgen del Carmen.

Es la llamada de la Virgen del Carmen a sus otros hijos de Málaga, a los que no son marineros, a los que son de la Colonia de Santa Inés, pero que sienten en su sangre y tienen a orgullo pasear a su patrona la Virgen del Carmen y que la llevan como una barca mecida en las olas de sus corazones.

Es la llamada de la Virgen del Carmen la que hace que una vez al año, vuelvan a sus calles, a sus raíces, a encontrarse con sus hermanos, amigos, parientes, todos aquellos hijos que han tenido que emigrar a otras barriadas, a otras ciudades.

Es la llamada de la Virgen, la que hace que sus hijos más jóvenes, al sonido de la campana del trono, enfundados en pantalón azul y camisa blanca, con el escapulario sobre el pecho, arranquen todos a una y la lleven hasta el cielo.


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